El papa Francisco afirmó en una carta publicada ayer que su prolongada enfermedad lo ha ayudado a ver de forma más clara el absurdo de la guerra, mientras su principal colaborador desestimaba cualquier sugerencia de renuncia y avanzaban los planes para su reunión del 8 de abril con el rey Carlos III de Inglaterra, que fue anunciada por el Vaticano.
El diario italiano Corriere della Sera publicó una carta de Francisco al director, firmada y fechada el 14 de marzo desde el hospital Gemelli de Roma, donde el pontífice de 88 años permanece internado desde el 14 de febrero por una compleja infección pulmonar y neumonía bilateral.
En la misiva, Francisco afirmó que la diplomacia y las organizaciones internacionales necesitaban “sangre nueva y credibilidad”. Y dijo que su propia enfermedad también le había dado claridad sobre algunas cosas, como ver a la guerra “aún más absurda”.
“La fragilidad humana, en efecto, tiene el poder de hacernos más claros sobre lo que dura y lo que pasa, sobre lo que nos hace vivir y lo que mata”, escribió.
Respondiendo a una carta del director del periódico, Luciano Fontana, Francisco también instó al director y a todos los periodistas a sentir “la importancia de las palabras”. “Nunca son sólo palabras: son hechos que construyen entornos humanos. Pueden conectar o dividir, servir a la verdad o servirse de ella.”, escribió. “Debemos desarmar las palabras, para desarmar las mentes y desarmar la Tierra”.
Francisco ha registrado ligeras mejoras en su salud y el número dos del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, desestimó cualquier sugerencia de que el Papa pudiera renunciar.
Ahora Francisco puede pasar parte del día sin altos flujos de oxígeno y utilizar solamente oxígeno suplementario ordinario suministrado por un tubo nasal, informó la oficina de prensa de la Santa Sede. Los médicos también están tratando de reducir el tiempo que utiliza una máscara de ventilación mecánica no invasiva por la noche, para forzar a sus pulmones a trabajar más. Si bien esos son “ligeros avances”, el Vaticano aún no ha dado un calendario sobre cuándo podría ser dado de alta. Dicho esto, el Palacio de Buckingham anunció el lunes que el rey Carlos III tenía previsto reunirse con Francisco el 8 de abril en el Vaticano.
Tales visitas de Estado siempre se organizan en estrecha colaboración con la oficina de Parolin, lo que sugiere que la Santa Sede cree que el pontífice estará de regreso en casa para entonces, salvo contratiempos.
La visita al Vaticano es un símbolo de los esfuerzos por construir lazos más estrechos entre la Iglesia Católica y la Iglesia de Inglaterra, la cual se separó de Roma en el siglo XVI durante el reinado de Enrique VIII.
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